miércoles, 11 de mayo de 2016

Consuelo

No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí. 
En la casa de mi padre muchas moradas hay; 
si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; 
voy, pues, a preparar lugar para vosotros. 
Y si me fuera y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, 
para que donde yo estoy, vosotros también estéis. 
Y sabéis a donde voy, y sabéis el camina 
Le dijo Tomás: Señor, no sabemos a dónde vas; ¿cómo, pues, podemos saber el camino? 
Jesús le dijo; yo soy el camino, y la verdad, y la vida: nadie viene al Padre, sino por mí. 
Creedme que yo soy en el Padre, y el Padre en mí; 
de otra manera, creedme por las mismas obras. 
De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras que yo hago, él las hará también; 
y aun mayores hará, porque yo voy al Padre. 
Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré, 
Para que el Padre sea glorificado en el Hijo 
Si algo pidiereis en mi nombre, yo lo haré.
Si me amáis, guardad mis mandamientos. 
Y yo rogaré al Padre y os dará otro consolador, para que esté con vosotros para siempre: 
El espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce;
pero vosotros le conocéis, porque mora con vosotros, y estará en vosotros. 
No os dejare huérfanos; vendré a vosotros. 
Mas el consolador, el Espíritu Santo, a quien el padre enviará en mi nombre, 
él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho. 
La paz os dejo, mi paz os doy; 
Yo no os la doy como el mundo la da. 
No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.
(Juan 14)

No hay comentarios.:

Publicar un comentario